Hierro puro (99.97 %+), en pedacitos, refinado electroliticamente, tambien un cubo de 1 cm3 de hierro de alta pureza (99.9999 % = 6N) para comparacion.
Autor: Alchemist-hp
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El hierro es un metal plateado de número atómico 26. Se conoce desde la antigüedad y no se ha atribuido su descubrimiento a ninguna persona.
Las muestras más antiguas datan de 3500 años a.c. y se encontraron en tumbas egipcias. Su contenido en
níquel (7%) sugiere que procedía de algún meteoríto. Parece ser que fueron los hititas, alrededor de 1500 años a.c., quienes empezaron a obtener hierro fundiendo sus minerales.
El dominio del proceso de obtención del hierro otorgaba una importante ventaja tecnológica a la civilización que lo tenía. Era el comienzo de la Edad del Hierro.
Algunos trabajadores del hierro se dieron cuenta de que había un hierro especial,
el acero, y que eran muy valorados tanto el material como aquellos que sabían como fabricarlo. Pero hubo que esperar a René-Antoine Fechault de Reaumur para saber que las propiedades del acero eran debidas al
carbono que acompañaba al hierro. La fabricación de acero dejó de ser un saber que se transmitía del maestro al aprendiz para convertirse en objeto de estudio científico. Se pudo estudiar como modificar sus propiedades variando las proporciones de carbono o añadiendo otros
elementos.
El hierro tiene un importante papel en el metabolismo de los seres vivos. Forma parte de la hemoglobina que es una proteína responsable del color rojo de la sangre. Esta transporta
el oxígeno desde los pulmones a las células donde lo cambia por
dióxido de carbono que lleva en su camino de vuelta a los pulmones.
Pero puede llegar a ser tóxico, por lo que los mecanismos que regulan su presencia en el organismo son muy importantes. Se cree que la acumulación a lo largo de la vida del organismo de fallos en su regulación puede estar detrás de enfermedades neurodegenerativas como
el párkinson o
el alzhéimer.
Una dieta equilibrada aporta la cantidad que un organismo puede perder a través de las paredes del estómago e intestinos y que suelen ser unos 7 mg/día en hombres y 11 mg/día en mujeres.