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Concedidos los Premios cicCartuja-Ebro Foods 2021, que impulsan la trayectoria de los investigadores noveles

20/05/2022 - Fuente: Universidad de Sevilla

Fotografía ilustrativa del artículo

El Centro de Investigaciones Científicas Isla de la Cartuja ha entregado este viernes 20 de mayo los Premios cicCartuja-Ebro Foods 2021. Estos galardones reconocen el trabajo realizado por jóvenes investigadores menores de 31 años que hayan publicado artículos en revistas internacionales de alto impacto en los ámbitos de la Química, la Biología o la Ciencia de Materiales. 

La iniciativa sirve para dar a conocer a la empresa y al público en general las actividades científicas llevadas a cabo por el talento joven del cicCartuja. Al mismo tiempo, se hace hincapié en el carácter social de la ciencia, concebida por y para los ciudadanos. El acto de entrega de los premios ha contado con la presencia de personalidades del mundo de la industria, la ciencia, universitario y la política local y autonómica.

El Centro de Investigaciones Científicas Isla de la Cartuja y Ebro Foods conceden desde 2010 estos premios destinados a impulsar la trayectoria de los investigadores noveles que desempeñan su labor en los institutos del cicCartuja. En esta duodécima edición, la dotación del Premio cicCartuja – Ebro Foods alcanza los 20.000 euros, de los cuales 10.000 euros son para el ganador y 10.000 a repartir entre las tres accésits. Dichas cantidades han sido donadas por la compañía Ebro Foods, la cual —a través de su presidente, Antonio Hernández Callejas— apuesta por apoyar la excelencia científica de los jóvenes investigadores del cicCartuja y por la transferencia del conocimiento desde el laboratorio a la sociedad. 

Los premiados

Xabier García Casas, del Instituto de Ciencia de los Materiales de Sevilla, ha ganado el Premio cicCartuja Ebro Foods 2021, con su trabajo publicado en Nano Energy. En él se logra conseguir energía asequible y no contaminante, puesto que se están desarrollando sistemas que captan la energía residual de vibraciones para convertirla en energía eléctrica aprovechable. Al mismo tiempo, gracias a su investigación se reduciría la dependencia actual de baterías, previniendo así la escasez de recursos que provoca su utilización. Por último, las técnicas de producción de las nanoestructuras funcionales se llevaron a cabo mediante métodos limpios y sin disolvente, con muy baja generación de residuos y con una elevada eficiencia energética en su crecimiento, siendo además estas metodologías directamente escalables al nivel industrial.

Marina Pérez Jiménez, del Instituto de Investigaciones Químicas, ha logrado uno de los accésits de esta edición con su trabajo publicado en Journal of the American Chemical Society (JACS).  El artículo presentado se enmarca dentro de lo que se conoce como ciencia básica. Lo novedoso de esta publicación es la estabilización de unidades de LiH monoméricas coordinadas a centros metálicos, en este caso Mo. Este tipo de enlace es muy inusual y apenas existen precedentes bibliográficos. Además de un estudio experimental, el artículo se complementa con un estudio teórico sobre el enlace químico en las nuevas moléculas sintetizadas. Este estudio proporciona información de gran interés a la hora de diseñar potenciales catalizadores bimetálicos, donde la cooperatividad entre ambos centros sea crucial para llevar a cabo transformaciones químicas.

Lola Azancot Luque, del Instituto de Ciencia de los Materiales de Sevilla, ha conseguido otro de los accésit en el artículo publicado en Applied Catalysis B: Environmental. El desarrollo de nuevas fuentes de energía renovables que puedan sustituir de forma progresiva los combustibles fósiles es uno de los grandes retos actuales para alcanzar un desarrollo sostenible. La reacción de su investigación está integrada en la tecnología de los procesos Biomass-to-Liquid (BTL), en los que a partir de biomasa se obtienen biocombustibles de segunda generación. Además, tiene un gran impacto medioambiental debido al uso de gases de efecto invernadero, entre ellos el CO2, contribuyendo de este modo a la conocida transición energética y, a su vez, ayudando al objetivo marcado en el acuerdo de París y el Pacto verde Europeo que con los cuales se persigue llegar a una sociedad neutra en carbono para el año 2050.

El tercero de los accésits ha sido para Raquel García Cañas, del Instituto de Bioquímica Vegetal y Fotosíntesis, En su artículo, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences of the USA (PNAS), se ha determinado el mecanismo que regula la expresión de los genes que codifican para el citocromo c6 y plastocianina, ambos genes esenciales ya que participan en el transporte electrónico fotosintético. Además, los promotores de ambos al ser regulados se han empleado para generar mutantes condicionales de diferentes genes, ya que estos mutantes pueden tener fines biotecnológicos en cuanto a la producción de determinados compuestos. Por otro lado, al tratarse de un mecanismo de respuesta a metales en el medio podría ser empleado en futuros estudios relacionados con aguas contaminadas con cobre debido a la minería. Por último, este sistema es homólogo a BlaR/MecR y BlaRI/MecRI, en bacterias patógenas como Staphylococcus aureus, provoca la resistencia a β-lactámicos. Por tanto, conocer más sobre este mecanismo y el sistema de transducción de señales del mismo puede ser útil en el diseño de nuevos antibióticos.