Las proteínas, carbohidratos, grasas y fibras que ingerimos están compuestas mayoritariamente de carbono hidrógeno, oxígeno y nitrógeno , pero para el funcionamiento correcto de nuestro cuerpo necesitamos además muchos otros elementos.

El potasio es un elemento esencial para la mayoría de los seres vivos. Juega un papel importante en la regulación de los fluidos intracelulares, la solubilización de las proteínas, los impulsos nerviosos y las contracciones musculares. Se encuentra de forma abundante en las frutas y verduras. La ingesta media diaria es de unos 4 gramos.

El calcio es el metal más abundante en elcuerpo humano. Por cada 1200 gramos de calcio en un individuo adulto 1190 forman parte del esqueleto y los 10 gramos restantes juegan un papel clave en determinadas funciones metabólicas. La ingesta diaria debe ser de aproximadamente 1 gramo si bien durante la infancia, el embarazo y en la tercera edad se necesita una aportación extra de dicho elemento. El queso, la leche y el chocolate son fuentes esenciales de calcio.

El magnesio se encuentra disperso en el organismo si bien el 60% se acumula en el esqueleto para mantener la estructura de los huesos. Asimismo, comparte función reguladora, ya que está implicado en muchas reacciones de obtención de energía dentro de la célula. Participa en el metabolismo energético, en la activación de enzimas que liberan glucosa, favorece la formación de proteínas, e interviene en la contracción nerviosa y en la transmisión nerviosa. Se encuentra fundamentalmente en verduras y frutos secos y debemos ingerir unos 400miligramos diarios. El proceso de preparación de los alimentos no lo altera pero si hay que tener en cuenta que la mitad del magnesio contenido en las verduras  pasa al agua de cocción mientras se cuecen.

 Magnesio

El hierro, el elemento más pesado que se puede formar en las estrellas, es esencial para los seres vivos. Juega un papel importante en el transporte del oxígeno. La cantidad de hierro diaria necesaria varía según la edad y el sexo entre 7 (hombres adultos)  y 20 ( mujeres embarazadas) miligramos diarios. El hierro de las carnes rojas es fácilmente asimilable.

El selenio es un elemento esencial para la vida ya que forma parte de la glutatión peroxidasa, enzima encargada de eliminar los peróxidos antes de que formen radicales libres y de la deiodinasa que participa en la activación de las hormonas tiroideas. Se encuentra fundamentalmente en el pelo, los riñones y los testículos. Se recomienda una ingesta de 450 microgramos diarios. Un exceso de selenio se pone de manifiesto por el mal aliento y mal olor corporal. Particularmente rico en selenio son las nueces del brasil.

El zinc se encuentra en una amplia variedad de alimentos como la carne de cordero, el pescado, las semillas de girasol, los cereales integrales….Se encuentra en el ojo, la prostata, los músculos, los riñones y el hígado. El semen es particularmente rico en zinc. La ingesta media recomendada es de unos 10mg al día para los hombres y 8 para las mujeres.

La mayor parte del iodo se acumula en la tiroides donde se producen la tiroxina y la triyodotiroidina que regulan distintas funciones metabólicas como la temperatura corporal. Es fundamental para el crecimiento. Se encuentra en el pescado, la leche y la sal iodada.

El fósforo es también esencial. Se encuentra en  la carne y la leche. Una dieta que incluya las cantidades correctas de calcio y proteína también suministra una cantidad suficiente de fósforo. Su principal función es la formación de huesos y dientes y cumple un papel importante en la forma como el cuerpo usa los carbohidratos y las grasas, en el crecimiento, conservación y reparación de células y tejidos y en la producción de ATP.

Pequeñas cantidades de cobre, manganeso, cromo y cobalto son fundamentales en nuestra alimentación.